Queridos amorTICos,
Como
periodista y futura docente me inquieta, y cada vez más, el desinterés de la ciudadanía,
siempre en términos generales, hacia la información de calidad y el buen
periodismo, así como el auge de la desinformación y el fenómeno de la posverdad.
Así que, desde el inicio del curso, tuve claro que mi Trabajo Fin de Máster
(TFM) estaría ligado, de una forma u otra, a la formación de un alumnado crítico,
aunque todavía no tenía ni idea de cómo acometer tal empresa.
Pues bien,
cuando hice las prácticas, tuve la oportunidad de explicar los textos periodísticos
y aproveché para hacer un pequeño experimento: en un ejercicio de reconocimiento
de géneros periodísticos, introduje varias noticias falsas. Nadie cuestionó
nada. Todos dieron por válidos titulares como “Islandia pagará por casarse con
mujeres islandesas” o noticias que afirmaban que más de la mitad de las
denuncias por violencia de género son falsas. Revelador, ¿no?
Visto lo
visto, allá por febrero, decidí que mi TFM trataría sobre cómo abordar la problemática
de las noticias falsas en el aula de Lengua Castellana y Literatura. Después de
muchas horas de trabajo, un sinfín de lecturas y reformulaciones varias, he aquí
mi resumen:
La
sociedad de la información ha dado paso a la era de la posverdad, donde las
noticias fraudulentas se propagan a la velocidad de la luz a través de
Internet. Se estima que en 2022 la mitad de los contenidos serán falsos. El elevado
impacto que las fake news tiene en el conjunto de la sociedad ha puesto
en evidencia la falta de sentido crítico en el acceso y consumo de la
información. Ante tal escenario, expertos en comunicación y pedagogos han
comenzado a desarrollar materiales y recursos didácticos para aleccionar sobre
las fake news durante la educación secundaria. Las intervenciones
diseñadas se centran en la identificación de los bulos, la comprobación de las
fuentes y en los procesos de verificación de hechos o datos, dejando un lado el
auténtico quid de la cuestión: la formación de un pensamiento crítico.
Esta
propuesta, dirigida a estudiantes de 4º de la ESO, pretende abordar la
problemática desde una nueva perspectiva. Para ello, se aúnan estrategias
propias de la formación del pensamiento crítico, como actividades de role
playing, análisis y comparación de noticias o defensa de creencias
contrarias a las propias, con el uso y exploración de las redes sociales. Así,
se pretende promover la literacidad crítica de los estudiantes en un contexto
real, mediante la toma de conciencia de sus sesgos de confirmación y la
exposición selectiva de noticias en Internet. El objetivo es que las futuras
generaciones estén inmunizadas contra las noticias falsas.
Resulta harto
difícil reflejar en 242 palabras todo el cariño, esfuerzo y tiempo dedicado,
pero estoy segura de que sabréis apreciarlo.
¡Hasta
pronto!
No hay comentarios:
Publicar un comentario